Javier Duarte se dedicó a todo, menos a gobernar y ser líder de su partido y verdadero eje de una administración pública.
La mayoría de sus funcionarios hacían lo que querían, sobre todo aquellos cercanos, los consentidos, los que acompañaban al ahora prófugo en sus borracheras por varios conocidas, con excesos, locuras y embriaguez de prepotencia.
Sin embargo, va saliendo a la luz una serie de tropelías que, hay que decirlo, Javier Duarte seguramente ni enterado estaba, no sólo por omiso en sus responsabilidades, sino porque casi todo el gabinete le ocultaba lo que consideraba le podía molestar, o sea todo, más después de alguna trasnochada, las que eran bastante frecuentes.
Ensimismado en sus grillas personales, pero sobre todo en la organización de su presunto enriquecimiento personal que tenía como líder en jefe a Karime Macías, dejó que varios hicieran lo que quisieran con tal de tenerlos contentos y como presuntos aliados, vamos, aplaudidores.
Son varios los nombres de los amigos cercanos de Duarte que abusaron de la cercanía, de su falta de oficio, de sus constantes distracciones, viajes y de la atención prioritaria que tenía en Karime, negocios y los de su familia política.
Los había por todas las dependencias, podrían calificarse como “los pequeños duartitos” aquellos que a la sombra del poder de un sexenio fatídico se hicieron ricos y que hoy, en su mayoría, gozan de impunidad.
El pasado fin de semana nos enteramos por un periódico de circulación nacional de otro presunto abuso, de esos de proporciones vergonzosas.
Presuntamente y con base en documentos de la contraloría interna y auditoría del primer año de revisión de 2015 a 2016, por lo menos cinco deportistas veracruzanos ya fallecidos cobraban becas en el Instituto Veracruzano del Deporte (IVD) durante la gestión del hoy prófugo Javier Duarte.
Como suele suceder en estos casos, todavía no se sabe quiénes cobraron a nombre de ellos una vez que murieron; situación que es investigada actualmente para deslindar responsabilidades.
Una ofensa más a los veracruzanos, ya no sólo a los que continuamos aquí, sino también a la memoria de los fallecidos. Definitivamente ¡Qué vergüenza!
ÁGORA
Pataleo rosa. Una verdadera revuelta en todos los partidos en la decisión final de quienes irán como candidatos. Llama la atención el caso de la priista Elvia Ruiz Cesáreo, que está alegando falta de equidad de género, pues no fue favorecida como abanderada de su partido a la presidencia municipal de Orizaba.
Pareciera que le falla la memoria, porque será difícil que varias de sus excompañeras en la Legislatura local olviden el penoso episodio en 2009, cuando por instrucciones de sus entonces jefes políticos, Ruiz Cesáreo defendiera en tribuna la cuota de 70/30 en candidaturas a mujeres, cuando sus compañeras de bancada buscaban el 60/40. Ni cómo ayudarla.
ÁGORA II
No se puede negar que se puso buena la selección final de quien va a pelear la alcaldía de Xalapa por la alianza PAN-PRD; hasta el momento se habría caído la candidatura del exalcalde David Velasco Chedraui y se confirmaría a Ana Miriam Ferráez, integrante de otra reconocida familia xalapeña.
Pero lo verdaderamente interesante apenas comienza, la disputa de esa alianza con el partido Morena y su candidato, quienes de acuerdo con varios sondeos serios si fuesen las elecciones mañana ganarían 2 a 1. Del PRI ya mejor ni hablamos.
@monicamarena
