Compadre incómodo de Nahle traicionó a Morena y ahora quiere ser alcalde

Transcurría la primera quincena de junio del año pasado y los estrategas del PRI confiaban en el voto cruzado, sobre todo en regiones altamente politizadas como el sur de Veracruz. Fue entonces que se dieron a la tarea de cooptar a operadores que desde un inicio los priistas incrustaron en Morena, PAN y PRD.

En Agua Dulce, la aspirante del Revolucionario Institucional a la diputación local, tuvo en Jesús Martínez Monroy –”El chocho”, para los de su ejido- a su “caballito de batalla”, quien a pesar de decirse compadre de Rocío Nahle, entonces candidata al Senado, le jugó las contras a Morena por cuanto hacía al Congreso Local. Su petición: 50 mil miserables pesos y 90 marranos para jugarle las contras a Gonzalo Guízar.

De esa calaña es quien se dice operador de la  Secretaria de Energía en Agua Dulce, quien presumiendo un compadrazgo, entiéndase éste, como confabulación, componenda, chanchullo, o enredo, con la zacatecana, ahora se comporta como un cacique pueblerino, recorriendo ejidos y colonias para autoerigirse como el anticipado candidato de Morena a la alcaldía hidrómila ¿Saben por qué? Lanza la pregunta a quien tiene paciencia para escucharlo y se responde asimismo: Porque así lo quiere mi Comadre Rocío y a quien no le guste, que se vaya a la Quinta del Presidente (La Chingada).

La duda que flota en el aire es: ¿Rocío Nahle ordenaría a Monroy operarle a la candidata del PRI a la diputación local? Más aún ¿Estaría enterada de las exigencias del tal “chocho”?

Si así no fue, muy mal hizo la Senadora con licencia al recomendarlo como Secretario del Ayuntamiento.

Ahora que esto ha trascendido, bien haría el alcalde de Agua Dulce, Sergio Guzmán, en sacudirse a este personaje.