A propósito de la Autonomía Universitaria de la UPAV y de la AADUPAV

La Asociación Académica y Docente de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, AADUPAV, desde su origen como un Movimiento de Protesta en oposición al desmantelamiento del Modelo Educativo Popular de la UPAV, estableció una hoja de ruta para lograr su meta de defensa del modelo educativo popular de la UPAV, la excelencia académica, los derechos laborales de sus docentes, y la normalización académica universitaria, que se resumía inevitablemente en lograr una profunda Reforma Legal de la Ley 276 que crea la UPAV, y permitiera su eficiente funcionalidad y operatividad académica; contemplaba el actual escenario político en Veracruz, y desde que se sabía que se aproximaba un proceso electoral, que de uno u otra manera la incluía, y que obligaba a explorar la mejor opción de acuerdo a su naturaleza e intereses, y que tenía que sopesar las candidaturas, particularmente, la de la sucesión a la gubernatura del Estado, es decir, sabía que la elección que debía analizar era la sucesión gubernamental, y las demás elecciones dejarlas al libre albedrío de sus Asociados.

Muchos le cuestionaron el por qué no se decantaba por el candidato del PRI, y la respuesta fue que estaba visto que el PRI no contaba por la loza duartista-fidelista que cargaba su candidato, y que en las encuestas lo hacían a un lado como un participante con reales opciones, por lo que, en la realidad había dos opciones, la candidatura obradorista y la candidatura oficialista, fue así como después de un análisis serio se descartó la opción “morenista”, no tanto porque su candidato fuese bueno o malo, sino porque el movimiento obradorista traía y trae su propio proyecto educativo y sus universidades, por lo que UPAV no entraría como está en ese proyecto educativo. Seguro que el candidato morenista Cuitláhuac García, hoy Gobernador electo de Veracruz, no había visto, ni conocía la potencialidad del Modelo Educativo Popular (Vasconcelista) de la UPAV, puesto que no tuvo ningún pronunciamiento o mención a favor de la UPAV en toda su campaña política electoral, y no lo hizo, porque su proyecto educativo es dictado desde la cúpula morenista.

Bajo la sospecha y casi la seguridad que la UPAV sería absorbida por el proyecto educativo de las Universidades AMLOS, y automáticamente, el proyecto UPAV que hemos construidos y aplicado a lo largo y ancho de Veracruz se transformaría en una Universidad experimental dejando a un lado su Modelo Educativo Popular, que pese a los detractores, ha sido un éxito que se debe preservar, se optó por el candidato oficialista, y fue así como después de reuniones y acercamientos con el candidato oficialista Miguel Angel Yunes Márquez se logró incorporar el tema de la UPAV en su proyecto educativo y su discurso político, conscientes que ésta opción podría no prosperar, como así ocurrió, la Asociación Civil AADUPAV tenía y tiene contemplado, como parte de su “hoja de ruta”. el proyecto de recabar las firmas y el apoyo del 0.2 % del padrón electoral, y bajo el formato legal de una “Iniciativa Popular” pedir la Reforma de la Ley 276 para lograr la Plena Autonomía Universitaria de la UPAV, la Autonomía Presupuestaria de la UPAV, el Reconocimiento de los derechos y prerrogativas laborales de los docentes de la UPAV, al establecer en dicha Reforma de la ley 276 su condición de “académicos de carrera” y no solidarios, además de la normalización de la vida universitaria para lograr la calidad educativa y la excelencia académica, incorporando a la docencia la investigación y la extensión universitaria.

La Autonomía Universitaria de la UPAV es una exigencia inevitable de toda Universidad Pública, dado que no puede haber academia, libertad de cátedra, y derechos laborales mientras la UPAV siga dependiendo como órgano descentralizado del gobernador en turno.

La Autonomía Universitaria de la UPAV es una exigencia para la democratización de la elección del rector y que éste salga de un proceso transparente, incluyente y democrático, tomando en cuenta su Conocimiento del Modelo Educativo de la UPAV, una solida Trayectoria Académica y Formación Académica con raíces en la propia UPAV.

La Autonomía Universitaria de la UPAV es una exigencia para la transparencia, la calidad educativa, la excelencia académica y el reconocimiento de la UPAV con derechos y prerrogativas tanto del gobierno estatal como federal, como cualquier universidad pública.

Hay que recordar que la UPAV fue construida como una extensión del poder político, vulnerable por lo tanto a la lucha por el poder y a transiciones de poder, con una legislación a modo del poder en turno, y con grandes vacíos legales que no le permitieron aguantar el brutal enfrentamiento político que vivió en la hoy frustrada transición democrática con el anterior grupo en el poder, por eso vale señalar que si desde su creación se hubiera establecido su Plena Autonomía, no tan sólo de nombre sino de hecho y de derecho, y se hubiera contemplado las estructuras académicas normales como toda universidad pública, es decir, legislación completa, eficaces y transparentes procesos escolares, administrativos, financieros, docentes, de investigación y extensión social, ahora la UPAV estuviera sin que los exabruptos políticos externos le interrumpieran la normalidad de su vida académica universitaria. Pero no ha sido así, y hoy enfrenta otra sucesión sin una ley reformada que le defienda de la política, por eso viene bien, exhortar a la coherencia al Gobernador Electo y que posibilite en primer lugar, un proceso transparente, incluyente y democrático en el relevo de la rectoría de la UPAV, y paralelamente, posibilite una profunda reforma legislativa que le otorgue a la UPAV su plena Autonomía Universitaria y Financiera, y se abstenga de una designación antidemocrática en el relevo de la rectoría.

Estas exigencias democráticas para atender la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, se circunscriben en los nuevos aires que se respiran en nuestros tiempos, y apuntan a fortalecer el lazo social y la civilidad que nos permita ir construyendo Instituciones fuertes, y una vida en sociedad en franco desarrollo y con certeza de futuro.

Era innegable que la UPAV pese a su legislación inacabada y manipulada por el poder, y que ésta situación ameritaría tarde que temprano reformas estructurales profundas que no se han dado, para su sostenimiento y consolidación académica, ha constituido una acertada fortuna para los miles de veracruzanos que jamás pensaron que podían tener una opción pública para formarse profesionalmente en una universidad en sus propios pueblos.
Aunque esto dependería de miras altas y decisiones de Estado Ejemplares, que desafortunadamente tampoco se han dado, ni ahora ni antes de su nacimiento de ésta gran oferta de educación media superior y superior para los veracruzanos.

Hoy vivimos los upavistas tiempos en el cual o sólo contemplamos cómo la Universidad Popular Autónoma de Veracruz es absorbida arbitrariamente por el poder en turno, o se opta por luchar por su Plena Autonomía Universitaria, y se preserva éste gran proyecto educativo de los Veracruzanos.
Por último, respecto a la declaración sobre la UPAV del gobernador electo Cuitláhuac García Jiménez, es pertinente señalarle, que lo que necesita la Universidad Popular Autónoma de Veracruz es únicamente Autonomía Universitaria y Financiera, y que hasta la oferta de basificación a su personal docente que le hace, pasa por una profunda reforma a la ley 276 que contemple la naturaleza de los docentes como “académicos de carrera”, y su derecho a organizarse para formar la organización que crea pertinente para defender sus derechos y cumplir con sus obligaciones, y que la designación del rector, debe transformarse en una elección democrática, transparente y equitativa.

Son tiempos de predicar con el ejemplo, y de coherencia política y moral.