Abandono y desprecio por la cultura

Lamentable el estado en el que se encuentran muchas bibliotecas en Veracruz. Dado que cada día es menor el número de personas que asisten a estos recintos, las autoridades han dejado de invertir en estos.
La gran mayoría de los libros que ahí se encuentran, ya son añejos. Pocas son las que tienen computadoras y, las que sí cuentan con estas, son bastante anteriores las versiones. Peor aún es la condición que guardan los inmuebles. La Biblioteca de la Ciudad de Xalapa es un claro ejemplo de lo anterior, con la duela podrida, con un aspecto que lejos de parecer un espacio para el estudio y el esparcimiento, parece una casa del terror.
Y es que, a lo mucho, las autoridades solo le dan una pintada a la fachada, pero no le ponen creatividad a cómo hacer de las bibliotecas un lugar atractivo para las nuevas generaciones.
Hace unos meses, visité la Biblioteca Carlos Fuentes, en el centro de Xalapa, por un foro que ahí se realizaba. Con tristeza, los únicos asistentes en el lugar éramos precisamente los que asistimos al foro.
Con Internet, ya los jóvenes no van a las bibliotecas. Creen que en Wikipedia o en el Rincón del Vago, encontrarán siempre la solución a sus tareas. La gran mayoría no ha tenido la experiencia de recorrer los anaqueles de una biblioteca, de dejar los libros en el carrito, vaya ni de pagar una multa por no regresar el libro a tiempo.
Cuando mayor concurrencia tienen, en todo el año, es cuando se abren para la realización de cursos de verano para niños. De ahí, el resto de los meses, son lugares en donde ya nadie pone un pie.
Las autoridades sí, pero también los maestros, deben fomentar el uso y disfrute de las bibliotecas en todo Veracruz. Los padres de familia debemos también inculcar a nuestros hijos el amor por la lectura, por la investigación, más allá de un click.
Afortunadamente tenemos espacios maravillosos, como la biblioteca del Colegio Preparatorio de Xalapa, que preserva en su interior libros de varios siglos, que es una fuente de conocimiento y un lugar imperdible en todo México.
No debemos permitir que las bibliotecas se conviertan en museos. Al contrario, fomentemos su uso, exijamos que en estas se invierta. En un estado tan rezagado y violento como el nuestro, necesitamos menos bares y más bibliotecas.
@YamiriRodriguez