Ayuntamiento de Xalapa: pésimo manejo de crisis

Los políticos tradicionales de la era priista solían afirmar como máximo apotegma: “se gobierna con los amigos”. Y así, esta fórmula sirvió durante décadas. Los cuates del gobernante en turno amasaron grandes fortunas. Por eso, desde que se anunciaba al candidato, la “cargada”, “la bufalada”, eran punto clave. Ya desde ese momento, al inclinarse públicamente a favor del abanderado, se iba dibujando un futuro promisorio.

Esas añejas prácticas se han venido repitiendo no sólo entre priistas, sino en militantes de todos los partidos. El amiguismo o compadrazgo no tiene límites, no conoce fronteras entre unas siglas y otras. Y ahora, en la llamada Cuarta Transformación (que más bien es una transformación de cuarta), estos vicios no son ajenos.

Ejemplos sobran, pero baste citar el caso de Xalapa. Desde que inició el gobierno municipal de Hipólito Rodríguez Herrero, su tendón de Aquiles ha sido la comunicación. Grandes escándalos ha habido y a la par un pésimo manejo de crisis: desde los funcionarios fuereños que han tratado de manera prepotente a los modestos empleados, pasando por el problema de los baches y ahora el asunto no resuelto del depósito de los residuos sólidos. Hubo otros temas polémicos mal manejados, pero nos quedamos con éstos que son los más sobresalientes.

El área de Comunicación Social se ha visto lenta y errática para transmitir el mensaje oficial. Veamos: con el tópico de los servidores públicos foráneos tardaron eternas semanas en despedir a quien no respetaba ni siquiera la dignidad de una mujer; con lo de los hoyancos en las calles, Hipólito salió con la tarugada de que la culpa es de Pemex por tardar en abastecer la emulsión asfáltica AC-20, y luego soltó la perla de que las arterias no fueron construidas por él, por lo que se deslindaba de los desperfectos que ahora presentan. Y qué decir del “affaire” de la basura. No se vio una estrategia oficial para informar a los ciudadanos que se abstuvieran de sacar sus desechos. Pero además, no ha habido una campaña en medios para sensibilizar a los xalapeños del verdadero origen del conflicto y de que el munícipe está trabajando en varias opciones. Todo ha quedado en declaraciones de prensa, que al rato se diluyen en el maremágnum informativo.

Lo único que se le ocurrió a un “genio” de la comunicación es proponerle al Presidente Municipal que salga a las redes sociales a transmitir videos sobre otros “logros” de la administración. Pero los ciudadanos, ávidos de respuestas al problema más inmediato que los aqueja, tundieron al edil con severas críticas por el mal estado en que se encuentran las calles y los montones de residuos que se acumulan en las esquinas, para festín de perros callejeros y fauna nociva.

Pero Hipólito no entiende, ni entenderá. No despedirá a los ineptos que tiene en Comunicación Social porque al muy ingenuo y “corazón de pollo”, le gana la amistad. Pues esos amigos son los que lo seguirán perjudicando con su ineficacia. Lo seguirán empinando y llevándoselo entre las patas. Que conste que lo dijimos a tiempo.

P.D. Ya desde ahorita vaticinamos que al subirse esta columna a redes, van mandar a sus “bots” y a sus incondicionales a atacar. Porque para eso es lo único que sirven estos ineptos. Lo bueno es que los ciudadanos ya se desencantaron, ya se dieron cuenta que les vendieron gato por liebre; ya se percataron de que los que gobiernan son buenos para el rollo intelectualoide pero malísimos como servidores públicos. Así que para qué intentan tapar el sol con un dedo. La gente ya se dio cuenta que el rey está desnudo.