A Río revuelto, ganancia de pescadores, reza el refrán. Y eso es precisamente lo que están haciendo políticos opositores a la 4T.
Este jueves vimos en redes sociales al diputado local Bingen Rementería ofreciendo dinero en efectivo, él y sus amigos dizque empresarios, a los médicos y enfermeras del IMSS e ISSSTE para que compren su material de protección ante el Coronavirus.
Bingen hace parecer que él y otros “empresarios” (seguramente azules) son las Madres Teresas de Calcuta en plena pandemia. ¿Pero cuándo ha visto usted, amable lector, que los inversionistas se preocupen por causas sociales cuando pagan sueldos de hambre, con nulas prestaciones para sus empleados? Mejor que esa lana que tan “caritativamente” pretende donar Bingen y sus cuates, que la utilicen para regalar despensas a los trabajadores que han despedido en plena contingencia sanitaria. Vaya incongruencia.
Pero además, para nadie es un secreto que Bingen seguramente ya está anotado para una candidatura en las próximas elecciones del año entrante, por lo que estos gestos de “caridad” no son más que nada actos anticipados de precampaña y descarado proselitismo político, y no sólo para él sino a favor de su propio partido. ¿A quién quiere engañar?
Sería interesante que el SAT investigara a estos dadivosos empresarios, para averiguar de dónde saldrá esa lana que pretenden obsequiar. ¿Lavado de dinero?… porque los empresarios son muy marros. No disparan pero ni en defensa propia.
