Candados a políticos reciclados

Los políticos reciclados que buscan el registro de nuevos partidos políticos estatales para conectarse al presupuesto público, al igual que las organizaciones sociales que sí tienen buenas intenciones para participar dentro de la ley en procesos electorales, tendrán que postular sus propios candidatos y alcanzar el 3 por ciento de la votación total de la próxima elección que será en el 2021, claro está en caso de que en el 2020, se apruebe su registro en el Organismo Público Local Electoral del Estado de Veracruz.

De acuerdo al calendario del OPLE, la aprobación del registro para nuevos partidos políticos que cumplan con el rigor de los requisitos que establece la Ley General de Partidos Políticos que rige a la ley estatal y la normatividad del OPLE, deberá darse en el 2020 de manera obligatoria en 60 días contados a partir de recibir la solicitud de registro.

Hasta ahora, los que aspiran son Bienestar y Justicia Social, ¡Podemos!, Movimiento Veracruzano Intercultural, TXVer A.C., Fénix, Organización Campesina y Popular, Movimiento de Actores Sociales y Unidad Ciudadana de todos ellos sólo uno o dos podrán superar el primer filtro que es realizar asambleas con la presencia de al menos el 0.26 por ciento del padrón electoral, algo muy complicado para las organizaciones que en su mayoría son locales de la capital veracruzana.

En esa lista se encuentran políticos reciclados como Francisco Garrido Sánchez quien ya encontró la manera de vivir del presupuesto de los partidos políticos aunque no tiene liderazgo alguno, ya antes tuvo el AVE, -Alternativa Veracruzana- que lo creó con el apoyo del gobernador en turno y que le sirvió para ser diputado plurinominal y muchos negocios, pero que después por su propia incapacidad lo llevó a la quiebra.

Otro político reciclado que también ya tuvo un partido local y perdió el registro, es Antonio Luna Andrade un dirigente social que logró mucho en los sexenios priístas para él y para sus agremiados a quienes los mantiene a cuota, a Toño no le alcanzó para ser diputado y ahora vuelve a la carga.

Por supuesto que son legítimas las aspiraciones de esos políticos y de otros grupos sociales que sí tienen interés en participar y que creen en la democracia bajo la concepción de un política de servicio a los demás y no de servirse.

Por lo pronto, el OPLE ya dejó claro que no podrá ir de colados con los partidos grandes y así conservar su registro, primero, deberán ganar por sí solos con sus propios candidatos, sus propios recursos y sus propios votos en la elección del 2021 para renovar las 212 alcaldías y los 50 diputados al Congreso Local de Veracruz.