La canícula ocurre en cualquier momento de la temporada lluvias y no exclusivamente en julio o agosto, explicó el subcoordinador de Fenómenos Atmosféricos de la Secretaría de Protección Civil (SCP), José Llanos Arias.
Dijo que este fenómeno se trata de un déficit de precipitaciones pluviales que pueden generar sequías severas dado a que se conjunta con los días más calurosos del verano.
“No precisamente la canícula se centra en la segunda quincena de julio o agosto, puede variar; conforme a los datos históricos, es la zona norte donde cada año se reporta el mayor impacto por este periodo”.
Indicó que las estimaciones para este 2018 al respecto muestran que “las temperaturas no serán muy altas”.
Y comentó que la canícula comprende a próximamente 40 días “la temporada de lluvias en la República Mexicana inició el 1 de junio y concluye el 30 de noviembre, durante este periodo existe una disminución de precipitaciones, tendremos días muy variables, esto implica que tengamos días mayormente despejados, a ese periodo es al que se le conoce como la canícula”.
En tanto, respecto a las temperaturas para ese periodo, Llanos Arias indicó que los pronósticos apuntan que estarían rebasándose los 40 grados Celsius, pero esto variará dependiendo de cada región.
“En la zona sur prácticamente es imperceptible la canícula, lo que tenemos previsto es que podría haber una disminución en las lluvias de manera más severa, pero si lo comparamos con temperaturas no se observa que las temperaturas sean muy altas, sí podría haber días muy calosos, desde luego, por arriba de los 40 grados”.
En ese sentido, aseveró que la Secretaría de Protección Civil (SPC) se mantiene atenta para emitir cualquier recomendación oportuna a la población.
“Esto ante una nueva ola de calor, no se descarta; pero en la suma y análisis de las temperaturas posiblemente la canícula 2018 estaría comportándose dentro de los niveles normales, o incluso, por debajo de la media”.
