Al Pueblo Mágico de Coatepec se le está yendo la magia. De unos meses para acá, se ha tornado violento e inseguro. No solo son los problemas cotidianos de baches, ambulantaje tolerado por el nuevo presidente municipal en el primer cuadro de la ciudad, sino que ahora hay asaltos a plena luz del día.
Habitantes han denunciado que, sobre la céntrica calle de Colón, por ejemplo, han sido asaltados por un sujeto, el cual, aunque ha quedado videograbado en las cámaras de seguridad de locales y viviendas de ese punto, las autoridades no han podido detener. Los despoja de sus pertenencias con un arma blanca y, a algunas, ha llegado a lesionar con el filo de la navaja.
Pero el colmo fue que la semana pasada, en uno de los nuevos fraccionamientos del municipio, unos hombres salieron de los cafetales, encapuchados, armados con machetes y tubos y amagaron a una familia, con niños pequeños, para vaciarles la casa.
Y eso sin mencionar los múltiples casos de secuestro que se han presentado en Coatepec y la región.
Pocos, muy pocos, elementos de la policía municipal se ven en Coatepec, únicamente los que están en el cuartel junto al Ayuntamiento y, los de la Fuerza Civil, atrincherados en su base ubicada en la salida a Xico.
Desafortunadamente la violencia está desbordada en todo Veracruz, y no son solo los delitos del fuero federal, sino también los del fuero común, donde los únicos responsables son los municipios y el estado: el asalto, el robo a casa-habitación, a vehículos.
Lamentable que esto suceda en un municipio donde lo que se presumía era su tranquilidad, en donde el turismo llega buscando la calma, y el presidente municipal panista se hace el desentendido; le preocupa más la feria, que será en un lodazal, que lo que sucede bajo su supuesta jurisdicción.
Las inversiones estaban llegando a Coatepec con hoteles, restaurantes, bares y un boom en la construcción de fraccionamientos. De no tomarse cartas en el asunto, cuanto antes, todo eso se irá por la borda.
