Con los migrantes no hay ‘bonita y sagrada amistad’

Dicotomías: Tijuana: pase usted señor fifí…Tapachula: atención chairos: NRDA

Después de los acuerdos de mayo pasado pactados con el gobierno de EU, la detención de migrantes en México ha crecido un 204.4% al pasar de 9,577 detenidos en junio de 2018, a 29,153 en junio de 2019, con relación al mes anterior el aumento es de 23%.

Esta situación es un giro radical a la política de fronteras abiertas (visas humanitarias incluidas), que antes de tomar posesión anunció el presidente López Obrador.

El cambio de paradigma obedeció a las presiones de Donald Trump, sin embargo, el caos lo originó la 4T, al no calcular el berenjenal en el que se (nos) metían. Fue una decisión que se revirtió, veamos.

En principio, la tradicional política mexicana de asilo queda en el olvido o en su caso, sólo se aceptan migrantes fifís, como la intelectualidad republicana o sudamericana.

En segundo término, será muy difícil exigir que se respeten los derechos humanos de los mexicanos migrantes, cuando aquí no se aplican esos parámetros con los transterrados.

Por último, volvemos al viejo dilema entre liberales y conservadores: privilegiamos la construcción de alianzas con América Latina o con América del Norte. Ojo, los neoliberales siempre eligen la segunda opción.