De manera sorpresiva, la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente (PMA) clausuró este miércoles los basureros municipales de Agua Dulce, Las Choapas y Moloacán y, en cambio, permitió que sigan operando los de Coatzacoalcos y Nanchital.
Incluso, en el caso del último la propia Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) del Gobierno de Veracruz reconoció que opera en forma clandestina en un terreno propiedad de la Sección 11 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (Stprm).
El titular de la PMA, Sergio Rodríguez Cortés, informó que los tres ayuntamientos involucrados tienen cinco días para pagar la multa correspondiente y regularizar su situación.
Declaró que en los tres casos hay evidencias de fumarolas que emanan de los sitios, lo que agrava la contaminación.
Sin embargo, trascendió que la supuesta quema sería responsabilidad de ciudadanos y no de las administraciones municipales.
Por su parte, Rodríguez Cortés dijo que con la clausura de los tres tiraderos suman 37 en la misma situación.
Las multas, abundó, van de los 80 mil al millón de pesos, dependiendo la gravedad del tema.
Con respecto a Coatzacoalcos y Nanchital, la PMA no reportó ninguna clausura. En el primer caso sigue operando el tiradero a cielo abierto de Villa Allende y en el segundo existe un proyecto de un particular para la construcción de un relleno sanitario.
