Demócratas no ceden a las presiones de Trump por el muro

El tiempo corre en contra del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al que le quedan apenas tres días para convencer a los congresistas demócratas que no bloqueen la aprobación del presupuesto, que incluye una partida inicial de mil 400 millones de dólares para empezar a construir su prometido muro en la frontera con México.
Ayer, por segundo día consecutivo, los dos líderes de la minoría demócrata en el Congreso dejaron claro que el deseo de su grupo es aprobar el presupuesto, pero que no lo harán mientras el gobierno del republicano no retire la partida para la construcción del muro.
“En lugar de arriesgar un cierre del gobierno al forzarle ese muro al Congreso y al pueblo estadunidense, el presidente debería dejarnos llegar a un acuerdo”, dijo Schumer. “Si el presidente no se inmiscuye, pudiéramos tener un presupuesto listo para el viernes”, insistió en una teleconferencia con reporteros, refiriéndose a los negociadores presupuestarios demócratas y republicanos.
“Propuesta inmoral e inefectiva”. La líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, concordó y dijo que “aunque Trump prometió durante su campaña construir el muro, no prometió que iba a quitarles la comida de las bocas a bebés ni recortar programas para ancianos, educación y el ambiente para poder pagar por la construcción”. Además, dijo que el muro es “una propuesta inmoral, inefectiva e imprudente”.
Si las negociaciones fracasan, el gobierno federal dejaría de funcionar el sábado, la misma fecha en que se cumplen cien días de la llegada al poder de Trump. Esto implicaría una suspensión de la prestación de todos los servicios públicos, menos los considerados como esenciales.
Una resolución sobre gastos necesitaría 60 votos para ser aprobada en el Senado de 100 miembros, donde los republicanos tienen 52 escaños.