Devolvamos valor a la familia

Desde todos los tiempos, el origen de la familia, es la unión de un hombre y una mujer, y esta a su vez, es la esencia misma de la sociedad. La mayoría de los libros de Derecho Civil, coinciden que la familia es la base de la sociedad, definiendo al concepto de matrimonio como la unión de un hombre y una mujer con fines de procreación.

Todas las familias se forman a partir de la unión de un hombre y una mujer; por mas efímera que haya sido esa unión, tal vez, sólo al momento de concebir un hijo, dando como resultado la vida de un nuevo ser, y también, a una nueva familia.

Con la creación de las leyes, a esa unión se le denominó como matrimonio. Tal como lo define el artículo 75 del Código Civil para el estado de Veracruz: “el matrimonio es la unión de un solo hombre y una sola mujer que conviven para realizar los fines esenciales de la familia como institución social y civil”
Pero el origen más remoto que podemos encontrar acerca de la familia, está en la biblia cuando Dios creó al hombre, está narrado en el libro del Génesis, en el capítulo 2, en el versículo 24 que dice: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán una sola carne”.

Hoy en día, existen muchos casos de desintegración familiar, por diversos factores, como la diferencia de carácter entre la pareja, infidelidad, adulterio, adicciones, enfermedad, incompatibilidad, y otros más que terminan con la separación física de la familia.

Actualmente, hay varios factores que amenazan a la familia de su forma original, conservadora, tradicional, por un lado está la manera vertiginosa de avanzar de la tecnología, la cual se ha vuelto más que una necesidad o herramienta para todas las personas, adultos, jóvenes, niños, al grado de causar un tipo de dependencia, que casi alcanza el nivel de esclavitud, generando una vida conectada con la tecnología, pero desconectada del entorno, incluyendo a la familia, a sus seres queridos, sin excepción de edades.

Con la modificación de las leyes, en una tendencia global, como en países europeos y en algunos de América, en donde, buscando la justificación en la no discriminación de los homosexuales y el respeto a los derechos humanos de las parejas del mismo sexo, se han planteado una serie de reformas legales, en cuanto al matrimonio entre personas del mismo sexo, la diversidad sexual, la educación sexual y la ideología de género.

Sobre éste último tema, no quisiera emitir una opinión, juicio o aseveración que genere polémica o vulnere susceptibilidades, porque de por sí, ya es un tema de controversias, sólo me limitaré a comentar el origen de la raza humana según la biblia en el libro de génesis capítulo 2 versículo 27 que dice: “Y creó dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.”

Es nuestra responsabilidad como sociedad civil, velar por los valores y transmitirlos a las siguientes generaciones, empezando por darle el valor que se merece al modelo original de la familia.