El Bronco, Yunes y otros gobernadores con tirria a los medios

Hace apenas unos días, el polémico gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, mejor conocido como El Bronco, subió a sus redes sociales un video donde denigra la labor de los medios de comunicación.
Según su propia visión, en su estado -donde frecuentemente hay motines en los penales, donde a diario hay ejecutados y cientos de delitos del fuero común-, todos los problemas que lo aquejan son simples invenciones de los medios por llenar espacios; de directores o jefes de redacción fastidiosos, que solo quieren llevarle la contraria al gobierno.
Su parodia del reportero López dista tanto de la realidad que lo único que confirma es la soberbia que los caracteriza.
Desafortunadamente como el gobernador de Nuevo León, hay muchos otros más. En Chihuahua, Javier Corral, desde campaña, les dijo a los medios que se olvidaran de una relación económica pues no los necesitaba para comunicar.
Y en Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, con el mismo desdén, todo lo quiere difundir a través de las redes sociales, como si en el Tatahuicapan, en la sierra de Santa Martha o en Huayacocotla, pudieran conectarse a Internet.
Las generalidades siempre son malas; es como si los medios dijéramos que todos los políticos son corruptos, que quieren llegar al poder para enquistarse, enriquecerse, preparar el trapecio para brincar a otro cargo. No. Aunque pocos, muy pocos, los hay también honestos, con verdadera vocación de servir.
Lo mismo para los medios de comunicación. Es cierto que han existido abusos en la relación gobierno-prensa, que algunos dueños y pseudoperiodistas se enriquecieron gracias a los convenios a modo. Pero también hay muchos otros medios críticos, independientes, que cumplen con su fin de informar.
Como El Bronco, el Gobernador de Veracruz ha reiterado que los medios solo le señalan lo malo, que no le dan la de ocho columnas….el punto es que ninguno de ellos tiene resultados pero, como buenos políticos, quieren la alabanza, el holán.
Lo cierto es que no se puede gobernar sin comunicar, y las redes sociales si bien son una excelente herramienta, no suplen a los medios tradicionales. Se sienten gobernadores 3.0 pero lo cierto es que a estas alturas del partido la gente, no los medios, no les reconoce logro alguno.
Como bien dice el dicho: cuando el chamaco sale feo, le echan la culpa la partera, en este caso, cuando no pueden con el paquete, le echan la culpa a los medios de comunicación o a los reporteros López.

@YamiriRodríguez