El verdadero rostro de Morena

Cuando el pueblo vota con las vísceras, con el estómago, suele equivocarse. Sobran los ejemplos de países cuyos ciudadanos empujados por la desesperación o el deseo de “cambio”, sufragan por su verdugo. Ahí está Venezuela con Hugo Chávez y Nicolás Maduro, Chile en las épocas de Pinochet, Cuba con la dictadura de los Castro, la España franquista, etc…

Por eso es que ahora que los diputados “golpistas” de Morena cerraron con candado las instalaciones del Palacio Legislativo so pretexto de que el titular del Poder Ejecutivo en Veracruz iba a presentar las propuestas de nuevos magistrados, se vieron bastante mal. Pero los morenistas estaban meando fuera de la bacinica. El mandatario estatal dio muestras de estadista y prefirió declinar ese derecho que le faculta la Constitución del Estado de Veracruz.

Con esta actitud autoritaria, los legisladores de Morena no sólo tomaron un inmueble, sino que encadenaron la libertad del Congreso de Veracruz.

Mal augurio sin duda estas actitudes, pues al rato cuando asuman el gobierno, el autoritarismo y la prepotencia serán el estilo personal de gobernar, parafraseando al politólogo Daniel Cossío Villegas.

Pero así es Morena. Cuando sienten que no pueden imponer su voluntad, cierran calles, toman edificios, queman lo que encuentren o bloquean carreteras.

¿Y esa será la “cuarta transformación de México” como ha pregonado MORENA en los últimos tiempos? Ya se verá.