Emilio Lozoya, ex director de Pemex, despidió al esposo de Rocío Nahle; ahora viene la venganza…

Interesante, lo que publica el columnista Mario Maldonado, este miércoles, en El Universal:

Para entonces, Emilio Lozoya Austin mantenía la soberbia que, según algunos de sus cercanos, le hizo perder el piso y ganarse muchos enemigos durante su paso por Pemex… Sin embargo, el camino se fue complicando y terminó por nublarse el día que Andrés Manuel López Obrador ganó la elección presidencial. Su caso, ya sabía, se convertiría en uno prioritario para el nuevo gobierno, sobre todo a la luz del nombramiento de quien estará a cargo de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle, quien intentó abrirle un juicio político no sólo por lo que consideraba malos manejos en Pemex, sino por un tema personal: a su esposo, José Luis Peña, Lozoya lo despidió de la empresa productiva del Estado por no haber presentado su declaración patrimonial. Lozoya Austin, dicen sus allegados, ya casi no se expone en público. Reparte su vida entre la Ciudad de México (mantiene su despacho de Prado Sur y su domicilio en las Lomas de Chapultepec), Nueva York (donde su esposa e hijos pasan largas temporadas) y Europa (a donde viaja constantemente por trabajo, principalmente a Madrid, España, pues empresas como Repsol están interesadas en sus servicios).