Uno de los principales problemas que enfrenta Veracruz es la inseguridad. A diario, personas son asesinadas de la manera más cruenta; jovencitas se reportan desaparecidas, además del robo a casa habitación y a vehículo que parecen ya el pan nuestro de cada día.
De ahí que tras el anuncio que hiciera este fin de semana la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conagua) de poner en marcha, a partir del mes de julio, la Fuerza Conago, se viera una esperanza en la entidad para combatir los delitos de alto impacto.
De acuerdo con el anuncio de los mandatarios del país, grupos de entre 50 y 100 policías operarán en varios estados del país, en coordinación con la Policía Federal y el Ejército, y cada entidad aportará 10 efectivos cuando otro estado lo solicité, a fin de realizar labores de inteligencia.
El primer grupo comenzará a funcionar en Guerrero, esto para combatir el robo de vehículos y será el Gobernador de esta entidad quien tenga bajo su mando la Fuerza Conago. El segundo en la lista es nuestro vecino estado de Puebla, cuyo gobernador, José Antonio Gali Fayad, ha solicitado el apoyo de esta instancia para combatir el robo de combustibles en el llamado Triángulo Rojo de los huachicoleros.
¿Y Veracruz para cuándo? Es difícil afirmar que con la llegada de Fuerza Conago al estado pudiera disminuirse considerablemente la incidencia delictiva, sobre todo porque el problema escaló durante años y hoy pareciera ya incontenible.
Lo cierto es que no solicitarla sería también un error, pues hoy lo que se requiere, en un Veracruz que vive ensangrentado, es hallar soluciones a esta ola de violencia. Varios medios de comunicación consignan al menos 831 ejecutados desde que inició esta administración hasta el 31 de mayo. Por eso urge probar la Fuerza Conago pues dice el dicho que no hay peor lucha que la que no se hace.
@YamiriRodríguez
