Existe alarma y marcada preocupación entre los productores ganaderos y los habitantes de diversas comunidades por la falta de agua, ya que las presas continúan vacías desde la primera mitad del presente año, lo que provocó una mortandad de ganado que se contabilizó por decenas de miles por la falta de agua y pastos.
Germán Ramírez del Ángel, productor ganadero, reconoció que efectivamente las lluvias registradas en el mes de octubre y noviembre permitieron a los potreros recuperar sus pastos, por lo que alimento para el ganado sí tienen.
Presas secas
Para los productores la falta de agua es uno de los mayores problemas que enfrentan por que las más 16 mil presas que existen en el municipio continúan secas, el agua que cayó no logró que estas tuvieran una buena captación y lo que obtuvieron apenas les alcanzó para un mes, pero ya se acabó.
En el norte de Veracruz han padecido una sequía desde hace dos años, los ganaderos requieren el agua para abrevar sus rebaños y los habitantes de las comunidades del área rural que se abastecen del vital líquido de estos jagüeyes se encuentran desesperados, los primeros porque el ganado corre el riesgo de morir por la falta de agua y los segundos porque no tienen una fuente de abasto para cubrir sus necesidades básicas.
El productor pecuario dijo que este estiaje también ha secado los bolsillos de los ganaderos, que se ven obligados a gastar recursos que no tienen en la compra y traslado de agua a sus potreros para abrevar al ganado.
(El Sol de Tampico)
