Investigadores crean gotas que corrigen la miopía

¿Se imaginan un mundo sin lentes? Pues esa posibilidad aparece en el horizonte gracias a una investigación que pretende curar diferentes tipos de problemas visuales utilizando únicamente gotas para los ojos, un pequeño dispositivo láser y una aplicación de smartphone.
Elaborada por científicos del Instituto de Nanotecnología y Materiales Avanzados de la Universidad Bar-Ilan, esta tecnología fue dada a conocer por la Sociedad Europea de Cataratas y Cirugía Refractiva y durante una conferencia sobre investigación del Centro Médico Shaare Zedek.
Las primeras pruebas han sido realizadas con éxito en ojos de cerdos (muy similares al ojo humano) y se espera que pronto puedan comenzar a realizarse pruebas en los ojos de las personas que deseen formar parte del estudio.
La tecnología consiste en corregir ciertos errores naturales en la forma del ojo que impiden la correcta refracción de la luz y que dan como resultado padecimientos tales como miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia (vista cansada), entre otros.
Para lograr dicha corrección el proceso consistiría en que los pacientes midan su vista con el uso de una aplicación desde su celular (dichas aplicaciones ya existen).
Posteriormente, sería necesario que usarán una segunda aplicación, desarrollada por los investigadores, que tendría un dispositivo láser conectado a su smartphone.
Los creadores de este invento han explicado que la aplicación funciona enviando pulsos de láser al ojo, mediante una app, los cuales marcan los espacios de la córnea que deben ser corregidos.
Por último, se colocan gotas llamadas Nano-Drops, es decir, nanopartículas de proteínas no tóxicas, que corrigen la visión de los pacientes en los sitios marcados por el láser.
A diferencia de las actuales operaciones con láser esta tecnología no resulta tan invasiva pues no elimina el tejido del ojo sino que las gotas hechas de nanopartículas corrigen el defecto que impide la correcta visión.
Se espera que las pruebas en humanos puedan iniciar el próximo año y aunque aún podrían pasar varios años antes de poder comercializar el producto ya existen inversionistas interesados en la tecnología que podría decirle adiós a los anteojos.
(El Universal)