El ministro de Exteriores de Corea del Norte, Ri Yong Ho, reivindicó ayer ante la Asamblea General de la ONU, el derecho de su país a contar con armas nucleares para defenderse de sus enemigos, y aseguró que sólo las utilizarán como “última opción” en caso de un ataque de parte de Estados Unidos o de sus aliados.
“No tenemos intención de usar o amenazar con armas nucleares a ningún país que no se sume a las acciones militares de Estados Unidos” contra Norcorea, advirtió, al asegurar que su gobierno “realizó con éxito” una prueba de una bomba de hidrógeno como “elemento disuasorio” para evitar “una invasión militar” de EU.
DEFENSA. El funcionario norcoreano se pronunció así desde la misma tribuna en la que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazara en días pasados con “destruir totalmente” a Corea del Norte “si se ve obligado” a defenderse a sí mismo o a sus aliados.
Yong Ho advirtió que su país está entrando en la “fase final” del establecimiento de un sistema nuclear, que aseguró tiene fines defensivos. “La posesión de un sistema de disuasión nuclear por parte de Corea del Norte —agregó— es una medida de autodefensa tomada como última opción”.
El ministro habló durante cerca de media hora en la tribuna de mayor relieve mundial, luciendo en la solapa una bandera roja con las caras del actual líder norcoreano, Kim Jong-un, y la de su abuelo y fundador del país, Kim Il-Sung.
CAPACIDAD. Ri señaló que Corea del Norte está “a unos pasos” de completar su capacidad nuclear y que “ha realizado con éxito” una prueba de una bomba de hidrógeno que podría ser montada en un misil intercontinental. Ello, “como parte de los esfuerzos para llegar al objetivo de completar una fuerza nuclear” disuasoria ante una invasión de EU. El funcionario no mencionó en qué fecha se hizo ese ensayo.
Asimismo, el ministro calificó como “injustas” las sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU por los ensayos balísticos y nucleares de Corea del Norte.
