Hace un par de días el consejero presidente del órgano público local electoral, Alejandro Bonilla, salió a declarar y a querer aclarar, que el organismo es autónomo, que no depende del gobierno y que por lo mismo, no recibe línea.
Bueno, de ser así, lo disimulan muy mal.
Se refería a la negativa de registro como candidato para reelegirse como diputado local de Amado Cruz Malpica. Más allá de la legalidad de la decisión, no tuvieron la oportunidad de aclarar mediáticamente a tiempo, lo que generó una precepción de que les ordenaron no registrarlo.
Apenas medio iban saliendo de esa, cuando la consejera Tania Vázquez Muñoz, declaró que lo debates a gobernador no van a ser moderados por periodistas, porque según dijo, podrían hacer preguntas de cualquier índole y pues hay que cuidar el debate, tener control del mismo.
Para rematar, que el formato será el aburrido de siempre, el tradicional, el que no sirve para nada.
Así, el OPLE muestra el rostro más arcaico y de control que hay en el país. Apenas los mexicanos y mexicanas hemos asistido a un debate de candidatos a la presidencia novedoso, nos acercamos a uno todavía más innovador en mayo y aquí, en la prehistoria. Creo que en el OPLE no vieron el debate.
Mal, muy mal por el organismo, que se suma al desprecio de los profesionales de los medios y que han demostrado a lo largo y a lo ancho de Veracruz, que son mujeres y hombres preparados, libres, capaces de moderar un debate con altura y preguntas que reflejen el sentir de las y los veracruzanos.
Como creerles que son autónomos con esas decisiones?
Que tristeza asistir al intento reiterado de silenciar a medios y a las y los comunicadores del estado.
Que tristeza que nos sigan considerando sus enemigos y que pena la arrogancia y la soberbia de quienes creen que estarán en los puestos de responsabilidad por siempre.
Acá los veremos de nuevo.
