Pandemonio de los medios tradicionales vs. comunicación por internet

Las encuestas y todo instrumento de comunicación por internet, fueron mal utilizados por los partidos políticos, pues por lo menos cinco, buscaban afanosamente su sobrevivencia y para seguir vigentes, necesitaban el tope mínimo de 3% de la votación nacional y al no obtener esos votos, están condenados a desaparecer y a no recibir las prerrogativas de la ley.

El dinero de los partidos políticos, proviene de las contribuciones que obligatoriamente pagamos los mexicanos y fue en gran parte empleado en la compra de encuestas “patito” y de publicidad engañosa. Le falta al INE el cierre definitivo del proceso electoral, y la determinación de cancelar las prerrogativas de los partidos Encuentro Social, Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza, Verde Ecologista y por un poquito el PRD; dejando vivos y actuantes, únicamente al PRI, al PAN y a Morena, este último partido ganador con más de 30 millones de votos mientras que los otros dos apenas unidos alcanzan cerca de esa cifra.

Por otra parte, la quiebra de la televisión, por cable y por satélite, es evidente; basta con enterarse de que el consorcio más grande de México y en tiempo reciente, más grande de Latinoamérica “Televisa”, ha despedido a cerca de 4,000 artistas, entre actores, actrices, cantantes, bailarines, cómicos, comentaristas de noticias, de deportes y de sociales, quienes por el concepto de “exclusividad” cobraban generosos salarios y prestaciones, como las regalías correspondientes a los derechos de autor.

Y por su parte TV Azteca, también ha puesto en práctica una austeridad más que republicana, reduciendo considerablemente la plantilla de todos sus trabajadores y suprimiendo programas, reportajes y enviados especiales, cuyos sueldos, compensaciones, honorarios y viáticos, también se encuentran notablemente disminuidos. Imagen Televisión que tuvo un despegue competitivo con Televisa y TV Azteca, después de la campaña presidencial y del Campeonato Mundial de Fútbol, se sabe que seguirá el mismo camino que los otros grandes consorcios.

Las empresas editoras de revistas, durante los dos últimos años, tuvieron un incremento de 1,000 nuevos títulos, aunque con mucho menor tiraje del que acostumbraban las revistas de circulación nacional. Por lo visto el pandemonio de la comunicación está muy cerca del infierno que podría incendiar y desaparecer a muchos medios impresos, a los que se acostumbraron los lectores adultos y de la tercera edad.