PRI anquilosado

En medio del peor descrédito gracias a los corruptos que acuerpo el PRI, en su pasada 22 asamblea nacional ordinaria, en donde acudió el presidente Enrique Peña, se confirmó que dicho partido no cambiara ni con la seria amenaza que priva de que no podrán conservar los Pinos.

Más de lo mismo, un acarreo infame, el que por cierto ni siquiera logró llenar en su totalidad el auditorio; la falta de creatividad y ganas de mostrar un nuevo rostro se diluyeron.

A pesar de que el dirigente nacional de ese partido tiene apenas 44 años, su discurso se escucha como el de un dinosaurio mas. Obsesionados por Andrés Manuel López Obrador, continuaron con la denostación velada al tabasqueña, en lugar de hacer un auto análisis de los negativos que tendrían que atacar.

La mayoría de los ahí presentes acudieron en la búsqueda de señales para el 2018, tan próximo como de pronósticos reservados, sobre todo al interior del PRI, en donde se confirmó que continuara la vieja tradición del “dedazo”.

A pesar de las malas experiencias que han vivido últimamente los priistas con los casos de los Duarte, Borge y ahora más recientemente Emilio Lozoya con el caso Odebrecht, no enfrentan de manera contundente el tema de la corrupción, que será sin duda el flagelo por el que podrían perder de nuevo la presidencia de México.

Hace falta firmeza en la postura del PRI de Peña, transcurre con singular tibieza, como si de verdad estuvieran en posibilidad de esperar de manera holgada el posicionamiento de quien va a ser el candidato a la presidencia.

De los aspirantes, el que tiene menos negativos es sin duda José Antonio Meade, el prototipo del hombre honesto, trabajador y de resultados; sin embargo, algunos experimentados priistas aseguran que la promoción del actual secretario de Hacienda es solo una cortina de humo.

El otro cercano al grupo compacto es Aurelio Nuño, pero nadie debe perder de vista ni dar por descontado a Miguel Ángel Osorio Chong, quien desde su poderosa posición ha logrado grandes alianzas políticas y con mayor colmillo, incluso con gobernadores de la oposición como es el caso de Miguel Ángel Yunes Linares de Veracruz con quien tiene una buena amistad.

José Narro, seria el posible abanderado priista que pueda hacer frente a un López Obrador imparable por aquello de la edad y con su buena relación con todos los grupos, incluidos los de la izquierda, pero al interior del PRI lo miran como un perfecto desconocido.

Nada esta escrito, pero de lo que si podemos estar seguros, es que en el PRI siguen siendo los mismos y haciendo las mismas cosas, como si se tratara del día de la marmota.

Ágora

Muchas amenazas al periodismo en todo el país, los casos aumentan tanto de los que por desgracia perdieron la vida, pero también de todos aquellos que en forma diaria reciben amenazas y temen por su vida y la de sus familias.

No se ve, menos se siente el respaldo de los gobiernos de todos los niveles en materia de seguridad, ojalá el periodismo no siga viviendo episodios desafortunados que llenan de sangre a nivel internacional a México.

@monicamarena