Además de la muerte, tampoco el tiempo perdido tiene remedio
Ignoramos cual fue la motivación de fondo de Carlos Slim, para salir con la balandronada de que no era importante el crecimiento económico en el primer año de la 4T.
Es claro, que por la injusta distribución de la riqueza, la sola expansión económica no desaparece la pobreza, pero también se puede afirmar que la atenúa.
Si hay jauja, en consecuencia tenemos más empleo, más consumo y mayor recaudación. Si una familia promedio depende del ingreso de uno de sus integrantes, el hecho de que al menos otro entre al mercado laboral, ayudará a subsistir con menos apremios.
Esa es la lógica del sistema que tenemos, misma que se complementa con un ingrediente perverso: que un infinitesimal grupo, se apropia de la mayor parte de la riqueza generada.
Es obvio que Slim no se despierta con la angustia de saber que comerá, ni que tampoco sus hijos padecen insomnio por no tener para medicina o escuela de sus hijos, por lo tanto, pedir paciencia a los de abajo, se convierte en un verdadero insulto.
Decía Keynes que en el futuro todos estaremos muertos, por lo tanto don Slim, las verdaderas bases del desarrollo se sentarán cuando se tome la decisión de acotar la brutal forma de expoliación de plusvalía que usted y sus socios, ponen en práctica todos los días.
