Riesgos de la transparencia por manipulación del INAI.

Primero la muerte del comisionado del INAI Carlos Bonnin Erales quien el 28 de noviembre pasado, decidió quitarse la vida mediante un salto al vacío, después de permanecer meditando en la terraza del 5º piso en el edificio que alberga al organismo. Luego la insistencia del sucesor del comisionado, para ser recibido en audiencia privada por el Presidente López Obrador, y ahora la orden emanada del INAI a la Presidencia de la República, para publicitar la lista de medios de comunicación, periodistas y columnistas, incorporados a la nómina del gobierno que presidió Enrique Peña Nieto.

El sucesor del finado Carlos Bonnin, es el Dr. Francisco Javier Acuña Llamas, quien desde que tomó posesión de su cargo viene insistiendo en una audiencia con amlo, pues los asuntos de gran importancia cuya “secrecia” por disposición de la ley corresponde al INAI, concierne indudablemente al propio Presidente y a sus más cercanos operadores políticos, quienes sin dejar de cumplir con la ley, deben cuidar que no se tergiverse la información secreta o que no cause efectos catastróficos su divulgación.

Cuando la ley federal de transparencia y acceso a la información pública gubernamental lo permita, se darán a conocer las acciones ejercitadas por los Poderes de la Unión, los Órganos Constitucionales autónomos o cualquier otra entidad federal del gabinete legal o ampliado y resulta que ante la falta de respuesta a la solicitud del titular del INAI, coincidentemente el organismo acaba de decretar la transparencia e información de “una lista” de medios de comunicación, periodistas y columnistas, que cobraron facturas, recibos o nóminas, durante el sexenio del licenciado Peña Nieto.

Para la 4ª transformación, sería conveniente la transparencia con que está obligado legalmente a proceder el INAI, aunque los hombres públicos que hoy detentan el gran poder, se convertirían en “las reces del mañana”, pues en política, los “carniceros de hoy”, generalmente terminan en eso.

Y para los que saben del manejo presupuestal y los gastos que representan, tan sólo en la publicidad que se dio a los actos donde participó la ex primera dama y su familia, hablan de millones de pesos que el erario público erogó en publicidad e imagen de la familia presidencial.
Veremos las habilidades del coordinador de comunicación social del gobierno de AMLO y su experiencia como periodista, editor y escritor, para que en este asunto el INAI no se salga de control.