“Suelta la sopa”, le piden a Serafín

En “Prosa aprisa” del pasado 28 de diciembre comenté que en noviembre, fuentes del Congreso local me habían comentado que el último día en funciones de la anterior legislatura, extrañamente de la Secretaría de Finanzas se habían depositado 140 millones de pesos a la caja de la Legislatura, cuando ya no había motivo.
“Me han corregido la cifra –dije entonces–. Me dicen que en realidad fueron sólo 75 millones de pesos y que sirvieron para apoyar con un pago extraordinario a los diputados salientes, entre quienes se repartieron 50 millones, y los 25 restantes fueron para los coordinadores de las bancadas así como para los miembros de la Comisión Permanente”.
Apunté que ese dinero habría entrado y salido de la cuenta de la Tesorería del Congreso, cuyo titular era entonces el contador Serafín Hernández Sagaón, operación que le habría valido que en agradecimiento por las atenciones a su padre Juan Nicolás Callejas Arroyo, entonces presidente de la Junta de Coordinación Política, su hijo Juan Nicolás Callejas Roldán, ahora líder la bancada priista, hubiera negociado para que lo dejaran como Director de Recursos Humanos de la nueva legislatura, donde cobra actualmente.
¿Alguien nos dará una explicación, pues finalmente se trató de dinero producto de nuestros impuestos? ¿Cuánto le tocó a cada uno de los diputados que recién se fueron?, pregunté.
Comenté que Serafín, según la fuente, andaba muy preocupado porque esos 75 millones estaban contando del presupuesto de 2016 y no daban los números para cumplir con los compromisos de fin de año como pagos, prestaciones y aguinaldos de diciembre.
Ayer, en su conferencia de prensa para fijar su postura ante el aumento al precio de las gasolinas, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares confirmó que autorizó un incremento de 75 millones de pesos a la nueva Legislatura para que pudiera hacer frente a los compromisos de fin de año ya que cuando entraron en funciones los nuevos legisladores se dieron cuenta que el presupuesto anual ya había sido aplicado en su totalidad por quienes los antecedieron.
También ayer, el actual presidente de la Junta de Coordinación Política, Sergio Hernández Hernández, informó que esta semana se contratará al despacho que se encargará de auditar ese sobreejercicio de 75 millones de pesos que dejó la LXIII Legislatura y que se podrán fincar responsabilidades a funcionarios y exfuncionarios del Congreso local.
No le deben hacer tanto al ensarapado y gastar una millonada en un despacho cuando hay escasez de recursos. Lo único que tienen que hacer es llamar a cuentas a Serafín, que ahí lo tienen a la mano, a quien sus amigos le están sugiriendo que “suelte la sopa” y que no cargue con la responsabilidad, ya que si bien él era el responsable del manejo de los recursos, sólo obedeció órdenes.
Lo único que tiene que hacer Serafín es confirmar que esos 75 millones de pesos se destinaron indebidamente al pago de marcha de los anteriores diputados, pues incluso bien sabe que hay un documento autorizando la anomalía firmado por los entonces coordinadores de las bancadas –lea usted que chulada de nómina– Juan Nicolás Callejas Arroyo, del PRI y de la Junta de Coordinación Política; Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, del PAN; Jesús Alberto Velázquez Flores, del PRD; Juan Eduardo Robles Castellanos, del PVEM; y Jaqueline García Hernández, del Panal.
Para no hacer distinciones y suponiendo que se repartieron parejo, entonces a cada angelito de los 50 que eran le tocó ni más ni menos que la friolera de millón y medio de pesos libres de polvo y paja, más su sueldo, más su aguinaldo proporcional que se pagaron, más lo que dicen ellos que tenían en un fondo de ahorro, así que mínimo se debieron haber llevado cada uno dos millones de pesos. De ahí para arriba.
¿Saben cuando van a ir a parar a la cárcel? ¡NUNCA! Todos se tapan con el mismo manto de la corrupción, mientras los pobres trabajadores están pagando sus abusos y pillerías porque los están despidiendo con el pretexto de que no hay dinero y hay que ajustar el presupuesto para pagar el déficit previsto para este año de 21 mil millones de pesos. Por eso cómo no indignarse ante tanta impunidad y tanta injusticia.
Seguramente se hará la auditoría y se confirmará el abuso, el desvío de recursos, pero el resultado se dejará para ser utilizado en caso necesario, esto es, para cuando alguno de los implicados se quiera poner gallito y no apoye el proyecto electoral de los panistas para 2017 y 2018. Si alguien se pone al brinco, entonces le harán efectiva la denuncia. A todos los tienen agarrados de donde ya todos se imaginan.
Ahora se entiende mejor porque le aprobaron todo a Duarte: porque ellos también formaban parte de su “banda”.

Desempleo, segunda buena señal
¡Vaya! Ayer el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares dio una segunda buena señal sobre el tema de quienes están quedando desempleados del gobierno.
“Rotundamente les digo que no hay ningún despido masivo. A los únicos que se ha despedido es a personas que se decían reporteros, que se decían periodistas (¡sopas!), que cobraban cantidades enormes que generaron daño terrible al Gobierno del Estado”.
Entonces se refirio al caso de los trabajadores del Seguro Popular. Dijo que lo que pasó fue que se venció su contrato el 31 de diciembre, pero que será recontratada la gran mayoría, que de 700 se reempleará a más de 500.
Bien, señor gobernador, pero ojalá y no se olvide de los de las otras dependencias y venga una tercera señal. Le aseguro que incluso con gusto se van a afiliar al PAN y van a apoyar sus futuros proyectos políticos.
Interesante también. De civilidad política habló en su conferencia.
Cuestionado por una reportera, dijo que saludó el martes al diputado federal priista Adolfo Mota Hernández por civilidad política, porque es el representante popular del distrito al cual pertenece El Lencero, municipio de Emiliano Zapata, donde tuvo lugar un acto, y en esa calidad fue invitado. Pero pidió no olvidar que él lo denunció ante la PGR y que cuando ésta actúe entonces no lo va a ir a saludar. Demandó a la instancia federal acelerar las investigaciones.
Me entró entonces la curiosidad. Si como gobernador y primera autoridad del Estado los priistas le corren la cortesía de invitarlo para asistir mañana al acto agrario en Boca del Río al que asistirá el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, ¿entonces también se hará presente por civilidad política? En una de esas, auténtico zoon politikon que es, va y les roba el acto.