Desde febrero, iniciamos un plan para trabajar en la detección a tiempo de coronavirus; se trata un sistema de monitoreo ya probado con la epidemia de influenza que nos permite saber si existen casos positivos en alguna comunidad apartada del estado, afirmó el gobernador Cuitláhuac García.
Al mismo tiempo, con el apoyo de epidemiólogos, sabemos no sólo si hay contagio, sino la velocidad de la expansión hacia los habitantes y cómo atender oportunamente; esto nos permitió bajar a Veracruz del semáforo rojo, explicó.
El mandatario señaló que las mismas unidades monitoras de enfermedades respiratorias sirvieron de base para los decretos de reducción de aglomeraciones y movilidad en municipios, así como el tiempo que éstos debieron permanecer.
“Ha funcionado tan bien, al grado que podemos tener un semáforo de riesgo municipal muy claro de cuántos contagios se están dando”, lo que incide en el control epidemiológico desde el Consejo Estatal de Salud, concluyó.
