XALAPA: DESACUERDO PRIISTA

Por tratarse de la capital del estado y de un Ayuntamiento en poder del PRI, todo mundo suponía que los del partido tricolor no iban a claudicar fácilmente en esta elección municipal.
Pero no. Todo parece indicar que les está agobiando el ánimo pesimista, ya que en vez de hacer sonar sus tambores de guerra se les percibe resignados ante el redoble de las campanas.
Y es que sorprende, por ejemplo, que a diferencia de las crisis políticas y de legalidad que enfrentaron y superaron otros partidos políticos por sus impugnados procesos internos de selección de candidatos –como fueron los casos de MORENA y últimamente del PRD, cuya dirigencia nacional terminó por ratificar como abanderada a la alcaldía a Ana Miriam Ferráez Centeno, cuya postulación fue combatida ante el Tribunal Electoral del Estado por el ex alcalde priista David Velasco Chedraui, que originalmente había sido electo por el órgano local del partido del sol azteca–, en Xalapa, el exdiputado Alejandro Montano Guzmán, del PRI, fue nominado sin ningún contratiempo, lo que aparentemente le daría ventaja sobre los demás potenciales contrincantes.
Todavía a mediados de marzo, en la convención municipal de su partido en la que fue electo formalmente como candidato, Montano quiso demostrar que el priismo en la capital veracruzana aún tenía músculo con qué competir. El evento, que no fue organizado en el reducido auditorio del CDE del PRI sino en un amplio salón de fiestas ubicado a la salida de la vía corta Xalapa-Coatepec, resultó concurrido y bullanguero como tradicionalmente solían ser los actos priistas hasta el proceso electoral del año pasado.
Además, el abanderado del PRI desechó la supuesta pretensión de colocar a su hija en la Regiduría Primera, que es la más peleada en las planillas de todos los partidos por ser la única posición segura en caso de un revés electoral. Así, pues, el exsecretario de Seguridad Pública dejaba de alimentar las falsas presunciones y evitaba a la vez proyectar la imagen negativa de un candidato que contendería sabiéndose derrotado de antemano.
Sin embargo, mientras los candidatos Hipólito Rodríguez, de MORENA; Miriam Ferráez, de la alianza PRD-PAN, y Nicanor Moreira, del PANAL, acudieron personalmente y con nutrida compañía a registrarse ante el Órgano Público Local Electoral con varios días u horas de anticipación, de Montano, hasta la medianoche de este martes 25 –último día del
plazo legal fijado para el registro de candidaturas– no existían testimonios fotográficos ni se había difundido algún comunicado partidista que confirmara su inscripción o presencia en el OPLE. Su registro, en paquete con el de otros candidatos priistas del resto del estado, fue corroborado hasta la media mañana de este miércoles 26.
Por eso es que un grupo de jóvenes militantes del PRI, que hasta los últimos minutos de este martes lo esperaban en la sede del órgano electoral para reclamarle directamente que no haya incluido a uno de sus representantes en su planilla de candidatos a regidores, declararon desencantados que no participarán en su campaña.
Se referían, por supuesto, a la exclusión de Rodrigo Montoya Rivera, exlíder juvenil que era impulsado por el alcalde xalapeño Américo Zúñiga Martínez, de quien Montoya fue secretario particular.
Al descontento juvenil y de algunos priistas del palacio municipal se ha sumado también la renuncia que este martes hizo pública José Luis Santiago López, quien tampoco fue considerado para ninguna posición edilicia pese a su militancia de 25 años y al trabajo partidista que se jacta realizó en la elección de 2016 como presidente del Instituto Político Empresarial del PRI.
PES: MÁS HOYOS AL PRI
Por cierto, la planilla registrada por el Partido Encuentro Social (PES) para la alcaldía de Xalapa está encabezada por Brenda Aguilar Blanco, exsecretaria de Gestión Social del Comité Directivo Municipal del PRI.
Pero, además, el PES incluyó como candidata a la regiduría tercera a Martha Patricia Campos Velázquez, vinculada al dirigente local de la CTM, Ignacio Vázquez, lo que obviamente parece contrarrestar al exdiputado local Carlos Aceves Amezcua, cuya inclusión en la planilla de Alejandro Montano Guzmán, del PRI, se consideró como una cuota partidista para dicha central obrera, dado el parentesco del extitular del COBAEV con el dirigente nacional cetemista Carlos Aceves del Olmo, su tío.
Otra aparente merma al priismo la constituye el caso de la maestra Rebeca Ruiz Hernández, de la Sección 32 del SNTE, que también ha sido postulada por el PES a una regiduría.
Bueno, el colmo es que como regidora quinta fue registrada María Antonieta Rosas, cuya principal referencia es que… ¡laboraba con el equipo del candidato priista Montano Guzmán en el área de publicidad!
¿QUÉ ASUNTO TRAE REYNALDO?
Vaya que el exsecretario de Gobierno y exprocurador Reynaldo Escobar Pérez sigue dando de qué hablar, pues su presencia ayer en el Tribunal Superior de Justicia del Estado desató todo tipo de suspicacias.
¿O a poco el reconocido abogado sólo fue a darle su saludo al magistrado presidente del TSJE, Edel Álvarez Peña, quien, por cierto, como dirigente del CDE del PRI le entregó en 2005 a Escobar Pérez la credencial número ¡un millón!, cuando el exalcalde capitalino decidió afiliarse al partido tricolor luego de haber militado en Convergencia –hoy Movimiento Ciudadano–, a través del cual llegó en el año 2000 a la presidencia municipal de Xalapa?