Algo traen los altos funcionarios del Gobierno de la República, que se andan encomendando a fuerzas superiores en estos días.
Primero, como se lo comentamos aquí, el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong pidió tener “fe” en la actuación de la Procuraduría General de la República, luego del maremoto de críticas por su “papelón” en la primera audiencia de Javier Duarte ante la justicia mexicana.
Pues ahora fue el mismísimo presidente Enrique Peña Nieto, quien al celebrar su cumpleaños número 51 este jueves, se encomendó a la “diosa fortuna” para que lo acompañe en los últimos 16 meses de su mandato.
Cuando quienes llevan las riendas del país piden ayuda a fuerzas sobrenaturales para hacer bien su chamba, ha llegado la hora de que la población se vaya de rodillas a la Basílica o le rece al santo de su predilección, porque lo más seguro, es que ya nos cargó el “chamuco”.
